El Negro es un perro guardián hermoso en adopción. La pasó muy mal.
Aparecio para las fiestas el año pasado, asustado por los cohetes. Nunca se logró saber si tuvo dueño, pero se supone que sí, ya que tiene la colita cortada prolijamente. Se volvió el perro de la cuadra, en Castelar. Todos los vecinos le daban de comer y él, que es súper guardian, les daba seguridad.
Pero las cosas se complicaron. Lo atropelló una moto y quedó renguito de una pata. Cuando hace reposo un tiempo, después la apoya. Más allá de eso, está perfecto de salud.
Hasta que un buen día, ser guardián le costó caro: algunos de los malandrines del barrio decidieron que les molestaba que el perro cuidara de noche, ya que no podían realizar sus poco lícitas actividades habituales, y empezaron a cascotearlo y a pegarle con palos.
Por suerte una vecina movió cielo y tierra y el Negro ahora está en un pensionado, fuera de la calle. Pero ella se quedó sin trabajo y cuesta mucho seguir pagando el pensionado.
Negro necesita un hogar definitivo. Está desparasitado, vacunado y con pipeta. Se lleva bien con otros perros y gatos. No se siente cómodo con niños (nunca les hizo nada, pero cuando se le acercan se pone tenso). Es un perro joven, de gran porte y de tamaño grande, parece mestizo de ovejero y doberman. Al principio es un poco desconfiado por lo que le tocó pasar, pero se porta bárbaro. Es un excelentísimo guardián. No se deja sobornar ni con comida.
Solo se entrega en adopción a gente responsable.
Aparecio para las fiestas el año pasado, asustado por los cohetes. Nunca se logró saber si tuvo dueño, pero se supone que sí, ya que tiene la colita cortada prolijamente. Se volvió el perro de la cuadra, en Castelar. Todos los vecinos le daban de comer y él, que es súper guardian, les daba seguridad.
Pero las cosas se complicaron. Lo atropelló una moto y quedó renguito de una pata. Cuando hace reposo un tiempo, después la apoya. Más allá de eso, está perfecto de salud.
Hasta que un buen día, ser guardián le costó caro: algunos de los malandrines del barrio decidieron que les molestaba que el perro cuidara de noche, ya que no podían realizar sus poco lícitas actividades habituales, y empezaron a cascotearlo y a pegarle con palos.
Por suerte una vecina movió cielo y tierra y el Negro ahora está en un pensionado, fuera de la calle. Pero ella se quedó sin trabajo y cuesta mucho seguir pagando el pensionado.
Negro necesita un hogar definitivo. Está desparasitado, vacunado y con pipeta. Se lleva bien con otros perros y gatos. No se siente cómodo con niños (nunca les hizo nada, pero cuando se le acercan se pone tenso). Es un perro joven, de gran porte y de tamaño grande, parece mestizo de ovejero y doberman. Al principio es un poco desconfiado por lo que le tocó pasar, pero se porta bárbaro. Es un excelentísimo guardián. No se deja sobornar ni con comida.
Solo se entrega en adopción a gente responsable.
2 comentarios:
ya encontró hogar? si no, publico la imagen en mi fotolog y la reenvio por mail!!
Todavía no encontró hogar. Si podés, difundilo.
Saludos!
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